Signos de alarma para detectar un Accidente Cerebrovascular (ACV)
Charlas de Seguridad 3 de septiembre del 2013 Prevención de Riesgos No hay comentarios
¿Cuáles son los factores predisponentes y cuáles los signos de alarma para detectar un Accidente Cerebrovascular (ACV)?
Según explican los profesionales de la Fundación Cardiológica Argentina, «un ataque cerebral es una enfermedad invalidante que afecta año a año a millones de personas«. Y en su sitio web explican que «se produce por un daño en las arterias del cerebro, ya sea por una obstrucción al flujo sanguíneo (por trombosis del vaso o embolia desde otra estructura vascular) o bien por ruptura de la arteria (hemorragia), afectando áreas del cerebro que son vitales para nuestra actividad cotidiana como el habla, el movimiento, la vida de relación y el trabajo».
El ataque cerebral puede presentarse de diversas formas. A veces un síntoma puede estar enmascarado y hacernos pensar que sólo se trata de un dolor muscular, porque sentimos el adormecimiento de un brazo, de una mano o de una pierna. A veces este miembro no responde con el movimiento apropiado.
Otras veces dificulta el habla o hace confundir las palabras. Por ejemplo, al intentar decir televisor se puede decir vaso u otra palabra. Estos síntomas pueden revertirse rápidamente y pasar inadvertidos. Ante estos síntomas, se debe consultar al médico porque se pudo haber tenido un ataque cerebral.
Consecuencias
El ataque cerebral puede resultar en las siguientes discapacidades: Pérdida del habla, de la escritura, de la capacidad de vestirse, de bañarse, de comer y de la capacidad de continencia, de la capacidad de comprensión, del movimiento y otras similares.
Esta situación puede afectar a personas de cualquier edad. Es padecida por muchas personas y es desvastadora. La discapacidad que provoca causa el sufrimiento del paciente y de su familia. Por eso es importante consultar y evitar el ataque cerebral.
¿Qué puede provocar un ACV?
Hay enfermedades que tienen una estrecha relación con el ataque cerebral y son las llamadas enfermedades de riesgo. Hipertensión arterial, Diabetes, Sedentarismo, Estrés, Tabaquismo y colesterol elevado.
«Todo tipo de accidente cerebrovascular (ACV) no tratado a tiempo genera secuelas neurológicas y, muchas veces, severas discapacidades. Éstas dependerán de la magnitud del territorio de isquemia o infarto del cerebro. Las consecuencias también varían según cuál sea el área del cerebro afectada. Así, puede generarse una hemiplejia, imposibilidad para caminar; dificultad para hablar o incapacidad para expresarse», asegura la Dra. Victoria Marquevich, jefa de Residentes de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario Austral (HUA),
ACV y discapacidad «El mensaje es que el ACV es la primera causa de discapacidad«, añadió la médica terapista, quien explicó: «Un ACV es la pérdida de irrigación cerebral repentina causada por la obstrucción de una arteria –en cuyo caso recibe el nombre de infarto cerebral, ictus o ACV isquémico– o bien por la ruptura de una arteria, motivo por el cual se denomina hemorragia cerebral o ACV hemorrágico».
En cualquiera de los dos casos, el avance de los síntomas –que idealmente deben ser registrados por hora desde el momento de su aparición– es gravísimo porque genera discapacidad.
«Hoy la ventana terapéutica, el tiempo durante el cual es posible realizar una intervención exitosa y positiva, es de cuatro horas y media pero solo en algunos pacientes preseleccionados, sino apenas alcanza las tres horas. No obstante, siempre hay que consultar inmediatamente porque cada caso es diferente. La consulta médica en estos casos es urgente», enfatizó la Dra. Marquevich.
Prevención
Los especialistas hacen hincapié en el antes y en el después de un ACV. «Es fundamental controlar los factores de riesgo que conducen a un ACV: hipertensión arterial, diabetes, colesterol elevado, tabaquismo, alcoholismo, el uso de drogas ilegales, entre otros. Además, a medida que pasan los años, el riesgo aumenta», indica el Dr. José Bueri, jefe del Servicio de Neurología del HUA.
Cifras
Anualmente 15 millones de personas sufren un ACV.* El costo de hospitalización por ACV en Argentina es US$ 434 millones.