Una y otra vez, se nos ha repetido que los accidentes son provocados por nuestros propios errores, nuestra negligencias o por no cumplir con las normas de prevención de accidentes. También provocamos otros accidentes que denominamos incidentes (o casi-accidentes) ya que generalmente nadie resulta lesionado ni se produce ninguna pérdida considerable. Sin embargo los incidentes son una advertencia de que algo anda mal y de que existe algún peligro o condición que necesita ser corregida.
