La primera razón de peso es que el sedentarismo mata. Y lo hace con tanta intensidad como el tabaco. En un estudio de la revista The Lancet (2012) los investigadores estimaban que “un tercio de los adultos en el planeta no practican la suficiente actividad física, lo que causa alrededor de 5,3 millones de muertes al año”.
Otro motivo para evitar el sedentarismo es prevenir dolencias asociadas, que sintetizaremos en esta ocasión con el epígrafe “e-trombosis”, del que hablaremos al final.
