Amoladoras, unas herramientas de corte y pulido realmente interesantes.
Puede que, con ese nombre, no te resulte del todo familiar, pero lo cierto es que se trata de un utensilio bastante conocido. La amoladora es una herramienta manual y eléctrica que cuenta con un potente motor en su interior para hacer girar un disco con el que realizar diversas tareas de bricolaje.

Este dispositivo puede utilizarse para cortar cerámica, cortar mármol o incluso cortar paredes. Todo depende, además de la potencia del motor eléctrico y la robustez del sistema de engranajes que lo conectan al disco, del material del que se hace precisamente ese disco que tiene en el extremo.
Para entender mejor su utilidad, basta con decir que la amoladora es una herramienta que se utiliza para llevar a cabo tareas de pulido, de corte y de desbastado de todo tipo de materiales. Las hay de diferentes tipos, unas más pequeñas con potencias de 500 – 1500 W y discos de entre 115 y 125 mm; y otras más grandes con potencias que alcanzan los 2600 W. Si quieres ver los modelos más interesantes que hay, puedes echar un vistazo a webs en las que comparan las mejores para tener una buena idea de lo más destacable.
Ahora bien, ya sabes qué son y para qué sirven, pero es muy posible que no sepas cómo se usan. No te preocupes, porque vamos a explicarte cómo usar una amoladora de forma eficaz y segura.
Cómo se utiliza una amoladora
Lo primero que debes tener claro es el uso que vas a darle a tu herramienta, aunque antes incluso de eso, es necesario que conozcas las medidas de seguridad con las que evitar cualquier posible accidente. Las amoladoras no son herramientas peligrosas, pero un uso inadecuado puede provocar problemas.
Medidas de seguridad
Para dar un uso seguro a una amoladora, lo primero que debes hacer es contar con una buena protección tanto para manos como para ojos. Es habitual que salten chispas si vas a trabajar con metales u otros materiales más duros, y la protección de este tipo es esencial para evitar quemarte o incluso que los destellos te impidan ver bien.
