Uno de los peligros ocupacionales en el entorno de la salud es la transmisión aérea de ciertas enfermedades infecciosas. El potencial de exposición no se limita a los médicos, enfermeros y personal de apoyo que atiende directamente a pacientes. Abarca también a las personas que entregan comidas, limpian las habitaciones de los pacientes y hacen trabajos de mantenimiento. Todas las personas que trabajan en áreas donde hay pacientes infectados con enfermedades de transmisión por el aire están en posible riesgo.

Una línea de defensa vital es el uso de protección respiratoria adecuada cuando sea necesario. El respirador N95 con mascarilla de filtrado es el que más se usa en el ámbito de la salud.
Tanto empleadores como empleados deben seguir las normas de salud y seguridad establecidas por la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA, por sus siglas en inglés), la Comisión Conjunta, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid, y otras organizaciones.
Es importante que tenga en cuenta las siguientes consideraciones con respecto a los productos de protección respiratoria:
- Siga las pautas del programa de protección respiratoria de su organización; esto incluye tener la aprobación médica necesaria
- Asegúrese de estar usando un respirador aprobado por NIOSH.
- Haga que le hagan una prueba de ajuste del respirador anualmente.
- Sepa cómo ponerse y sacarse el modelo y la marca de respirador específico que use.
- Sepa cómo usar el respirador de manera segura y eficaz.
Dispositivos de protección respiratoria
Los respiradores N95 con mascarilla de filtrado son una parte importante del control de infecciones en los entornos de salud.
A diferencia de las mascarillas quirúrgicas, los respiradores están diseñados específicamente para proporcionar protección respiratoria al crear un sello hermético contra la piel y no permitir que pasen partículas que se encuentran en el aire, entre ellas, patógenos. La designación N95 indica que el respirador filtra al menos el 95% de las partículas que se encuentran en el aire.
El personal debe usar los respiradores conforme a las normas del programa integral de protección respiratoria OSHA 1940.134. Los empleadores deben cumplir el requisito de crear e implementar un programa de protección respiratoria escrito que incluya procedimientos específicos para el lugar de trabajo, y proveer capacitación sobre esos procedimientos por parte de una persona calificada. La norma 1910.134 completa de la OSHA se puede encontrar en http://www.osha.gov (busque «standard 1910.134«).
Respirador con mascarilla de filtrado.
Respirador N95 con mascarilla de filtrado, con buen ajuste. Probado y aprobado por NIOSH.
En la mayoría de los casos, en los entornos de salud, se usan los respiradores N95 aprobados por NIOSH con mascarilla de filtrado para proteger a quienes los usan de las partículas en el aire, que incluyen patógenos. Tenga en cuenta que los respiradores N95 no protegen contra gases, vapores o aerosoles y que podrían proporcionar poca protección contra derrames directos de líquidos.
Las mascarillas quirúrgicas no son protectores respiratorios.
Mascarilla quirúrgica, no se ajusta a la cara y crea espacios por donde pueden entrar partículas. Autorizado por la FDA.
Las mascarillas quirúrgicas pueden ayudar a bloquear las gotitas más grandes de partículas, derrames, aerosoles o salpicaduras, que podrían contener microbios, virus y bacterias, para que no lleguen a la nariz o la boca. Sin embargo, se usan principalmente para procurar proteger a los pacientes de los trabajadores de la salud, reduciendo su exposición a saliva y secreciones respiratorias. No crean un sello hermético contra la piel ni filtran los patógenos del aire muy pequeños, como los que son responsables de enfermedades de transmisión aérea.
Respiradores N95 Quirúrgicos.
Respirador N95 quirúrgico con mascarilla de filtrado, con buen ajuste y resistente a líquidos. Probado y aprobado por NIOSH y autorizado por la FDA