No existe nada sobre los cables de extensión que pueda sugerir algún peligro. No hay piezas, no hay llamas y ningún ruido. Estos son inofensivos…, pero pueden ser peligrosos si son mal utilizados.
Solamente deben usarse cables en buen estado. De preferencia aquellos que son probados y aprobados por laboratorios de pruebas de equipos eléctricos. Los cables que presentasen desgaste deben ser reparados o depositados en la basura.
Si usted le hace un nudo, lo aplasta, corta o incluso si lo dobla, podría estar dañando su recubrimiento aislante comprometiéndolo. Esto podría causar un corto circuito o un principio de incendio, así como también un choque eléctrico. La mayoría de los cables eléctricos transporta electricidad común desde 110 volts sin grandes problemas, a no ser una sensación de un tirón. Bajo ciertas condiciones, una corriente de 110 volts podría matar.
Tales condiciones pueden ser representadas por un toque en la parte sin revestimiento del cable estando con las manos mojadas o sudadas, o pisar sobre superficies mojadas.
Siendo así, proteja el cable de extensión que esté usando. Enróllelo en grandes vueltas. No lo doble sin necesidad. No lo someta a tensión. Un cable nunca debe ser dejado colgando en un paso o sobre una superficie donde transite gente. Los motivos son sencillos: evitar crear trampas que puedan causar accidentes y evitar daños al propio cable.
Si un cable de extensión mostrase señales de desgaste, o si usted supiera que éste ya fue dañado, cámbielo por otro. No arregle cables por cuenta propia, a menos que esté habilitado para tal.
En situaciones especiales, son necesarios tipos especiales de cables. Algunos siendo resistentes al agua y otros no. Algunos son aislados para tener resistencia al calor, otros son proyectados para soportar la acción de solventes y otros productos químicos. Si no conoce las características técnicas provistas por el fabricante, evite usar cables en locales húmedos, cercanos al calor o lugares que contengan productos químicos.
CONSEJOS IMPORTANTES
- Maneje el cable gentilmente, evitando tensarlo, doblarlo o aplastarlo, cuélguelo en un lugar donde no obstruya el paso o pueda representar riesgos.
- La utilización adecuada de cables de extensión no es difícil ni es complicada. El uso correcto no toma tiempo y puede librarlo de un choque eléctrico.