Consejos para llevar adelante procedimientos de emergencia en espacios confinados:
- Utilizar un sistema pre aparejado de rescate. El menor tiempo utilizado en su colocación, se requerirá menos tiempo para que el personal se introduzca en el espacio.
- Una persona con equipo completo deberá estar listo para entrar y facilitar las maniobras de recuperación del que se encuentre en el interior. Si llegara a ocurrir algo imprevisto. Los rescatistas deberán tener la habilidad necesaria para introducirse en aberturas estrechas, quitándose el arnés del equipo de protección respiratorio y poniéndoselo de nuevo después de introducirse. Esto se puede realizar colocando el arnés con el recipiente de aire suspendido arriba del rescatista, utilizando una línea Prusik asegurando el paquete con un mosquetón, todo esto afianzado a la línea de descenso del rescatista, bajando a la misma velocidad. Considerar que las maniobras se limitan al tiempo de suministro de aire disponible en el recipiente.
- Otro sistema que da mas facilidad de movimiento y autonomía es el de conectar con mangueras de conexiones rápidas y estas a su vez a tanques de mayor capacidad situados en el exterior del espacio confinado.
- Adicional a este equipo es recomendable llevar a la cintura un equipo de suministro de aire para escape.
- En el exterior deberá contarse con un equipo de oxigenoterapia.
- Como en cualquier maniobra de rescate, los procedimientos de atención y cuidados al lesionado pueden ser modificables a causa del estado de la víctima o de las condiciones ambientales, los daños ocasionados al trasladar a un paciente que no respira, a una atmósfera donde la respiración se normalice, quedan en segundo termino. Cualquier otra maniobra de inmovilización deberá hacerse en el exterior del espacio confinado y que el paciente este en un lugar seguro.
- Tanto el equipo como las técnicas de rescate deben ser especializadas, estas ultimas se van mejorando con el tiempo y manteniéndose actualizados con los métodos que vayan surgiendo. Es necesario que el personal involucrado en atención y respuesta a emergencias obtenga la pericia manteniendo sus conocimientos en técnicas de rescate y en el manejo de equipo para llevar a cabo las maniobras de manera rápida, eficaz y segura principalmente.
- Los procedimientos de rescate deben establecerse antes de entrar y deberán ser específicos de acuerdo a cada tipo de espacio confinado.
- Las maniobras de rescate deben ser practicados regular y suficientemente para obtener un mejor nivel de habilidad que disminuyan los riesgos contra la vida de los rescatistas y que asegure una respuesta que permita actuar con la calma necesaria ante cualquier emergencia.
- La practica constante y el entrenamiento especializado en lugares acondicionados lo mas semejantes a los reales para conocer las situaciones de desventaja que pueden presentarse.
Sistema de rescate para espacios confinados
Se recomienda el uso del sistema de tres modos de operación para trabajos en espacios confinados, con capacidad integrada para el rescate y la recuperación. Esta unidad sirve de seguridad como cable retráctil, con un mecanismo de freno por inercia que límite las caídas libres a 610 mm. O menos. Una persona incapacitada puede ser elevada a un lugar seguro, a razón de aproximadamente metros por minuto.
Los modos de ascenso/descenso están diseñados solo para situaciones de emergencia. La Unidad de Rescate en Espacios Confinados esta conformado por tripie, polea, carabinero, Bolsa de transporte, amortiguadores de caídas, arneses de cuerpo entero.
Purificación del aire
El aire que respiramos es una combinación de gases y está algunas veces contaminado por sustancias extrañas. La purificación del aire (necesariamente cuando el aire comprimido es para propósitos de respiración) es regularmente más importante. En su forma limpia, el aire contiene 11 diferentes gases, nitrógeno y oxígeno son críticos para el sistema respiratorio humano. Un ejemplo típico de aire descontaminado contendrá 78 % de nitrógeno y 21 % de oxígeno. El remanente son nueve gases que representan el 1 %.
El promedio de consumo por persona, es aproximadamente de 26 pies cúbicos de oxigeno equivalente al peso de la comida consumida durante un periodo de 24 horas. El peso de este oxigeno es equivale aproximadamente al peso de la comida consumida durante el mismo periodo o cerca de 2 ½ lbs.
El oxígeno removido desde la inhalación del aire, otros 500 pies cúbicos de aire debe ser respirado para obtener los 26 pies cúbicos de oxigeno.
Cuando el oxigeno disminuye por debajo del 16% (por volumen) el individuo es capaz de experimentar anoxia. Los síntomas son visión borrosa, confusión mental, y deterioro de la coordinación muscular. Estos síntomas se intensifican cuando el oxigeno contenido es fuertemente reducido, hasta el 11 %, resulta en inconsciencia. Exposiciones prolongadas por debajo del 11 % causará la muerte.
El oxigeno contenido del aire comprimido para respiración humana deberá tener equitativamente limites reducidos. Un valor de 21 % proveerá oxígeno contenido adecuadamente para necesidades fisiológicas y es el acostumbrado estándar para el sistema respiratorio. El oxigeno contenido arriba del 25% incrementará bruscamente el fuego y daño a la salud por el uso.
Estándares del aire
Para proteger la vida humana, los limites de calidad del aire para respiración deben ser establecidos. El aire suministrado para la respiración humana deben cumplir con los estándares mínimos establecidos por varios cuerpos gubernamentales, incluyendo la U.S. Navy, Compressed Gas Association, the Federal Government y el estado de California. Tales estándares están usualmente referidos tales como grado «D», en referencia a la tabla 1 para The Compressed Gas Association. Estos estándares son aplicables para aire comprimido usado en el relleno de sistemas de respiración de circuitos abiertos. Todos los estándares revisados definen los niveles mínimos aceptables. Un incremento en alguno de los componentes es razón para el rechazo del aire como insuministrable para propósitos de respiración.
Requerimientos de pureza del aire
Los contaminantes pueden ser agrupados dentro de dos categorías:
- Aquellos que últimamente causan enfermedad al tejido pulmonar o daño en alguna parte de los pulmones.
- Aquellos que no tienen efecto directo sobre los pulmones pero pasan al interior del torrente sanguíneo disminuyendo en ambos la capacidad de intercambiar y levar oxigeno a las células de la sangre o siendo llevado a otras partes del cuerpo con efectos tóxicos directos sobre otros tejidos.