Cada año, alrededor de seis millones de personas en el mundo mueren de un accidente cerebro vascular (ACV) constituyéndose como la patología neurológica más común y primera causa de discapacidad en la población adulta.
Desde la perspectiva de la rehabilitación, el accidente cerebrovascular es un gran generador de discapacidad, tanto física como cognitiva. De la población que sufre ACV, un 15 a 30% resulta con un deterioro funcional severo a largo plazo, lo que implica un alto grado de dependencia de terceros. Además, el ACV se ha establecido como la segunda causa de demencia a nivel mundial.
Al momento de instalarse esta enfermedad el tiempo es la variable más importante, ya que al inicio de los síntomas, el paciente puede recibir un tratamiento que pasadas las primeras horas deja de funcionar. El problema de esta enfermedad es que los síntomas son muy variados por lo que a las personas no logran recordarlos facilmente. Por tal motivo, se generó una regla mnemotécnica denominada, la regla de las 5 C que permite a las personas recordar estos síntomas con más facilidad.
Cuerpo: parálisis o cosquilleo de un solo lado, especialmente en pierna y brazo
Confusión: para hablar o entender
Ceguera: pérdida repentina de visión
Coordinación: pérdida de la coordinación o el equilibrio
Cabeza: dolor severo, repentino y persistente.
Ante cualquiera de estos síntomas es indispensable la consulta urgente a la guardia hospitalaria para recibir el tratamiento correspondiente.