Vamos a entender un poco sobre el ruido e intentar eliminar este mal de nuestros ambientes de trabajo.
Primeramente vamos a hablar de los sonidos. Cuando oímos el cantar de un pájaro, cuando oímos una música suave y agradable para nuestros oídos, o cuando oímos el sonido de una catarata, sentimos un cierto placer. Esta sensación es maravillosa, nos hace bien. Sin embargo, si la bocina de un carro suena muy cerca de nosotros, o escuchamos determinadas canciones de rock ensordecedoras, o incluso, una gota de agua que cae sin parar sobre una lata, despertándonos por las noches, decimos que ese “ruido” es terrible, es desagradable, que nos incomoda. Los sonidos se propagan en el aire a través de ondas que al llegar a la membrana del tímpano, hacen vibrar y transmitir hacia otras partes del oído haciendo que todo un mecanismo funcione para que podamos oír. Cuando estas ondas son muy fuertes pueden provocar la ruptura de esta membrana provocando lesiones en los oídos. Un ejemplo ello es el ruido provocado por una detonación cerca de nosotros.
Dependiendo de la intensidad de la explosión, objetos más grandes podrán romperse debido al traslado de las ondas, cuya intensidad provocaría esta ruptura. En nuestro ambiente de trabajo no se producen los ruidos de una detonación, sin embargo, otros ruidos de menor intensidad se producen y de manera más constante.
Dependiendo de esa intensidad y del tiempo de esa exposición, no hay ruptura del tímpano, pero se producirán otras lesiones y con el pasar de los años se hará irreversible. Es el caso de la sordera. Los efectos del ruido son demostrables más fácilmente en la interferencia con la comunicación.
Cuando estos sonidos tienen niveles semejantes a los de la voz humana y es emitido en la misma frecuencia, causa un encubrimiento, que puede interferir en las tareas que dependen de la comunicación oral, pudiendo perjudicarse la recepción un aviso o de una voz de comando, aumentando riesgos de accidentes. Sobre los efectos sobre la salud podemos citar tres tipos:
- La sordera temporal. Como ejemplo, si nosotros estamos en un local ruidoso por algunos minutos, y notamos alguna dificultad para escuchar, normalizándose luego el regreso de la audición, después de algunos instantes;
- Sordera permanente. Sucede cuando hay exposición repetida durante largos períodos. Al inicio, la persona no percibe esa alteración de la percepción auditiva. Con el pasar de los años las pérdidas aumentan. Ver televisión, radios con volúmenes altos, son señales evidentes de esta pérdida auditiva;
- Trauma acústico. Es la pérdida auditiva causada por un ruido muy fuerte repentino. Ejemplo: De una explosión.
CONSEJOS IMPORTANTES
- Debemos preocuparnos en nuestro ambiente de trabajo, evitando la exposición a ruidos intensos y prolongados. Para evaluar el nivel de estos ruidos, existen aparatos que fueron proyectados para apoyar los mismos ruidos de cualquier persona, que son levantados por personas calificadas en su operación. Dependiendo de la intensidad es obligación de los técnicos responsables adopten mecanismos de protección para reducir los niveles de ruido que perjudiquen a los trabajadores, o indicar el EPI para el caso.
- Algunas recomendaciones son importantes recordarles a aquellas personas que trabajan en ambientes y/o con equipos ruidosos:
- El ruido puede provocar insomnio, impotencia sexual, náuseas, pérdida del apetito, nervosismo, ansiedad, el aumento del número de accidentes, absentismo, etc.
- Para evitar que seamos atacados por males provocados por el ruido, debemos usar del EPI indicado que para este caso es el tampón contra ruido.