Con todo lo que hemos dicho sobre seguridad, a veces nos olvidamos de lo obvio. La seguridad es un tema personal. Las máquinas con las que trabajamos pueden tener protección, pero si no la usamos, no cumplirán sus roles. Podemos estar con nuestras gafas de seguridad, pero si no las usamos, no nos protegerán. Lo que cuenta a largo plazo es la creencia firme de tener que hacer de todo para poder trabajar con seguridad. Tenemos que usar el equipo de protección individual si queremos tener un buen desempeño en seguridad. Nadie podrá hacer la seguridad por nosotros.
Supongamos que usted es uno de los que cree en la importancia de proteger nuestra vista ante cualquier circunstancia y que actúa siempre conforme a esta idea.
Cuando alguien del grupo quiera incomodarlo por tener excesivo cuidado, ¿qué haría? decide no responder y se aleja, le cuenta a esa persona la razón por la que protege sus ojos incluso cuando el riesgo es pequeño.
Tal vez ese detalle, haga que la persona reflexione y pueda llegar a la misma conclusión que usted. Los dispositivos para protección de ojos han sido empleados en la industria desde 1910. Tal vez alguno de ustedes conozca a alguien que haya tenido heridas en los ojos o que se haya quedado ciego por no usar las gafas de seguridad en el momento debido. Algunas partículas pueden dañar los ojos de forma muy violenta, pudiendo perder la visión en uno de los ojos. Varios tipos de gafas de seguridad están disponibles para proteger sus ojos contra partículas, aéreo dispersores, vapores y líquidos corrosivos. Dependiendo de la tarea, podría usar las gafas o los protectores faciales o las máscaras faciales.
¿Sabía que con tan solo una partícula de esmeril podría perder la vista? ¿Sabía que basta que salpique un producto químico corrosivo para dejarlo ciego? A veces busca una disculpa para no usar gafas de seguridad. Una de las disculpas más frecuentes es: “me molestan la visión“, “son incómodos”, “hacen que me vea ridículo”, “me avergüenza usarlos”. Siempre que la protección para sus ojos lo aburra, recuerde que no podrá ver a través de un ojo de vidrio, o siempre tendrá que usar un instrumento para cubrir ese ojo perdido. La peor disculpa que hay es la que dice que este trabajo es rápido, que me tomará solo 1 minutito. Un accidente tarda mucho menos. Y el problema quedará para el resto de la vida.
Una de las frases más usadas es: “Lo olvidé“… Es usada frecuentemente como disculpa para no usar las gafas. No estamos diciendo que no podemos olvidarnos una que otra vez, eso puede ocurrir. Sin embargo basta que la olvide una sola vez para que este olvido, este lapsus de memoria sea el más caro de toda su vida. Por lo tanto, usar las gafas de seguridad, es una cuestión de hábito.
CONSEJOS IMPORTANTES
- Reflexione sobre lo siguiente: no existe una buena razón para que alguien deje de proteger sus propios ojos. La vista no tiene precio, por lo tanto, proteja siempre sus ojos.